miércoles, 21 de mayo de 2014

SUEÑOS CUMPLIDOS (2ª parte)

6 de julio de 2009. Lunes.

Después de almorzar con Alfredo Di Stéfano, Cristiano entra en las tripas del estadio. No hay tiempo que perder. Hay dos entrevistas previstas para Real Madrid TV. Primero en inglés y luego en español. 

- Es un día memorable para mí. Estoy muy contento. Hoy se cumple un sueño. Estoy muy confiado en que aquí voy a ganar mucho. Estoy en el club justo para ganarlo todo. Es un sueño hecho realidad - afirma Cristiano.


El jugador quiere dejar muestras de su sencillez y ofrece su lado más humilde.

- Tengo 24 años y me gusta aprender, sigo aprendiendo. Mi ciclo de aprendizaje no ha terminado. Con 24 o con 40, siempre se aprende. Las cosas no caen del cielo y por eso voy a seguir manteniendo la misma ambición. Es una coincidencia que en mi primer año aquí la final de la Champions se celebre en Madrid. Es un sueño jugarla y ganarla - explica Cristiano.

No puede obviar lo que acaba de ver por las calles según se acercaba al Bernabéu y lo que, intuye, le espera dentro de unos minutos cuando salte al escenario.

- ¿Va a haber un partido? Ja, ja, ja... Es increíble. Todo esto me da más motivación y confianza para dar lo mejor que tengo. Sólo he estado una vez en mi vida en Madrid, pero es una ciudad que me gusta. Los españoles son mucho más parecidos a los portugueses y después de vivir en una ciudad como Manchester, ¡cómo no voy a poder vivir en una ciudad como Madrid!  Aquí me voy a sentir más en casa porque voy a estar más cerca de casa, de mis hermanos, de mi mamá, de mis amigos. Son tres horas de coche, una hora de avión.


Después de la prensa espera el presidente. Juntos entran en el palco de honor. Florentino Pérez ejerce de cicerone. Se acercan a las cristaleras desde donde se ve el terreno de juego. Las gradas ya están prácticamente llenas y falta casi una hora para la presentación.

- ¿Va a haber partido ahora, presidente? - comenta el futbolista riéndose. Sin duda, se muestra impactado por lo que está viendo y viviendo.

- ¡Qué bien le sienta el blanco! - exclama Florentino Pérez. Está emocionado. El futbolista empieza a hacer malabares con el esférico.

- A ver si te va a salir mal ahora cuando salgas, a ver si te vas a poner nervioso... - replica el presidente.

- No, no me pongo nervioso.

Continuará...

martes, 13 de mayo de 2014

SUEÑOS CUMPLIDOS

"Estar en el Real Madrid es la realización de un sueño que yo tenía desde niño. La historia del Real está llena de conquistas a lo largo de las décadas y fue siempre una luz que iluminó mi camino"

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6 de julio de 2009. Lunes.

El primer día del resto de su vida. la fecha en la que rubrica su contrato con el Real Madrid. El primer día que Cristiano pisa el Santiago Bernabéu. El primer día que se enfunda la camiseta blanca. Una jornada que no podrá olvidar fácilmente por mucho que pase el tiempo. Nunca en la historia del fútbol la presentación de un jugador alcanzó tamaña magnitud. Ni siquiera la de Maradona en el San Paolo de Nápoles, de la que justo el día anterior se habían cumplido 25 años.

El barrio de San Antonio de su Funchal natal, su barrio, estaba en fiestas. Como si quisiera celebrar que su hijo predilecto conseguía su penúltimo sueño. Llevaba mucho tiempo, semanas, meses, años, esperando ese día. Desde el 11 de junio que el Manchester United colgó en su página web la noticia del acuerdo con el Real madrid para su traspaso, se imaginaba cómo sería esa su primera experiencia en Madrid.




Se enteró de la noticia en Los Ángeles, donde pasaba unos días de vacaciones con su familia. Tan lejos, con su madre, Dolores, con sus hermanos Hugo, Elma y Katia, celebró la libertad. Él ya sólo quería jugar en el Real Madrid y aterrizó con una etiqueta que no le pesa, pero que tampoco oculta: la del futbolista más caro de la historia. No fue un día de veinticuatro horas. Fueron tan intensas que a Cristiano le parecieron muchas más. Se levantó pronto en Lisboa para asegurarse de que iba a llegar a Madrid en un vuelo privado a la hora prevista. Su agenda estaba milimetrada. Puso el pie derecho en la Base de Torrejón con veinte minutos escasos de retraso. Eran las 12:50. Vestía cazadora roja, vaqueros y deportivas. Pelo muy corto. Bronceado lógico después de tres semanas de vacaciones. Se cubría del sol justiciero que caía sobre Madrid con unas enormes gafas de sol. 

Solo pudo dar tres pasos antes de firmar el primer autógrafo, en un gran póster suyo que regalaba el diario MARCA con motivo de su llegada y presentación. A su lado, Jorge Mendes, algo más que un mánager - representante. Un fiel amigo que le guía desde hace más de ocho años. Por momentos se ve rodeado de los empleados del aeródromo. Una foto, dos, tres. Dos guardias de seguridad le abren paso. Sube al coche. A su lado Jorge Mendes y Zé, su cuñado y también su fiel escudero. Se quita la cazadora. Hace y tiene calor. Luce una camiseta blanca de Nike, su marca patrocinadora.




Intenta contemplar el horizonte, el camino que le lleva a la gloria, a través de los cristales ahumados. Está serio. Habla en portugués con sus compañeros de viaje. Lleva una botella de agua en la mano. Una cámara de Real Madrid Televisión le marca al segundo como si fuera Carragher, el defensa del Liverpool con el que ha tenido muchos de sus duelos más enconados en la Premier. Cristiano no se siente incómodo por el objetivo que le vigila.

Continuará...